El transfuga Meléndez en su movida pro-patronal, la
directiva sindical pasiva y los trabajadores inquietos e irritados
Laclase.info
La situación en Sidor, es inaguantable. Los trabajadores viven un gran desconcierto producto de la desinformación impuesta por la directiva sindical [SUTISS: Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Similares]. La gran mayoría de los trabajadores asienten que las 12 cláusulas económicas del contrato deben terminar su discusión, ya que no reconocen a las firmadas por José Meléndez y otros directivos como el fin de la discusión, por dos razones muy simples y estatutarias:
1. Porque nunca pasó por una asamblea de trabajadores para
ordenar la firma.
2. Porque al no provenir lo firmado por Meléndez de la
discusión entre los sidoristas, y tampoco ser una propuesta del sindicato ante
la empresa, es inevitablemente una propuesta de la empresa en acuerdo con
Meléndez y eso no se puede aceptar por los sidoristas.
Por esta razón, José Meléndez se ha convertido en el
depositario del malestar de los trabajadores, más aún al descubrir cómo fueron
desmejoradas clausulas previamente acordadas. Sin embargo, el mandado no está
totalmente hecho. Para la empresa y Meléndez, se trata de hacer pasar lo
acordado entre ellos e imponer una derrota a los trabajadores.
En la búsqueda de lograr este objetivo, Meléndez se ha dado
a la tarea de “visitar la empresa” respaldado de un grupo de guardaespaldas.
Ante esta situación, muchos se hacen las siguientes interrogantes: ¿Cómo es
posible que ante estas razones y el deterioro que tiene ante los trabajadores
este personaje, el PSUV lo respalde con más poder? ¿Cómo es posible que quien
traicionara al movimiento de los sidoristas al firmar a sus espaldas la entrega
del contrato, esté husmeando por la empresa de manera campante?
Pues, no le es tan fácil. Ya de varias áreas, lo han echado.
De Palanquillas lo sacaron a cabillazos, en el área de Laminación no puede
entrar, tampoco en Fábrica de Tubos. De estas áreas lo han sacado los
trabajadores, ya que su presencia no es grata. En el área de Planos en Frío, en
el Rebobinador 1, José Meléndez, agredió con empujones y verbalmente al
delegado de Tendencia Clasista, Francisco Palmares, -quien aparece en la foto
de esta nota-lo que generó de forma inmediata la respuesta de los trabajadores,
sacando a Meléndez también de esta área.
En conversación mantenida con Francisco Palmares, nos afirma
que: “el desconcierto de los trabajadores puede revertirse en cualquier
momento. Los directivos que no firmaron deben dar la cara y llamar a asamblea
para que los trabajadores decidan rellenar los puestos restantes de la
directiva sindical, con gente comprometida con los trabajadores y poder dar
término a la discusión del contrato. El desánimo que existe es producto del
gran engaño que han significado los directivos que firmaron. Por eso decimos
que los que no firmaron a espaldas de los trabajadores deben llamar a asamblea
y debemos responder a Meléndez y a la empresa con la unidad de los
trabajadores”.