Por: Agencias.
Quito 21 de marzo.- Las bandas del francoespañol Manu Chao y la portorriqueña Calle 13 se presentaron ayer en la capital ecuatoriana con un gran concierto, que sirvió de plataforma para que ambos criticaran la "minería contaminante" en América Latina.El concierto se produce a sólo dos días antes de que arribe a Quito la Marcha por el Agua y por la Vida, organizada por el movimiento indígena y organizaciones sociales, que tiene como objetivo, el rechazo a los planes mineros del actual Gobierno.
Más de 25.000 personas llenaron el Estadio Olímpico Atahualpa de Quito, el inicio del espectáculo estuvo a cargo de la banda ecuatoriana Papá Changó.
Manuel Tomás Chao, el nombre original del gran cantante francoespañol, Manu Chao, apareció en escena con su maravilloso ritmo, donde fusiona el reggae, el ska y el rock, entre otros. A sus 50 años, Manu Chao, mantiene su gran vitalidad y conceptos ideológicos.
"El señor matanza", las sagas de "Radio Bemba", "Próxima estación" y "Clandestino" acompañaron al músico francés de origen español, que se vio obligado a regresar en varias ocasiones al escenario a petición del público que lo ovacionó en el Atahualpa de Quito.
"Bienvenida Tijuana", "Me gustas tú" y "Wellcome to Tijuana" fueron cantadas a todo pulmón por la gente que las interpretó en francés, por petición de Chao, que tampoco quería irse y quien frecuentemente golpeaba su corazón para devolver el cariño recibido desde la cancha y las gradas del Atahualpa.
Ya al final, Manu Chao recomendó a los jóvenes tomar conciencia sobre la realidad ambiental que vive el planeta y aseguró que bajo ninguna circunstancia la minería a gran escala es una solución para la humanidad.
"No a la minería", añadió y rechazó a los "políticos mentirosos" que engañan a la gente con promesas de progreso que nunca se cumplen.
Ya con el público al borde de la locura, el francoespañol dio paso a sus "panas" de Calle 13.
En el fondo del escenario una animación gráfica explicaba la elaboración de un explosivo de alegría con el que Calle 13 saltó al escenario.
"Visitante" (Eduardo Cabra) inició el tiempo musical para que aparecieran en escena "Residente" (René Pérez) y "PG-13" (Ileana Cabra) quienes pusieron a bailar, saltar y cantar a los asistentes al concierto.
"Baile de los pobres", "Se vale todo", "Atrévete-te", "Calma pueblo" y "Vamos a portarnos mal" calentaron aún más el ambiente que llegó casi al paroxismo con "Latinoamérica".
"Residente", el alma de la banda", no descansó de enviar mensajes a la juventud congregada, sobre todo aquellos contra la "mega-minería" que, según dijo, ha destruido zonas completas y no ha dejado casi nada para los habitantes de ellas.
"bajo ningún cielo se puede contaminar ningún país, no a la minería". Una campaña contra la minería estuvo presente en el escenario durante el concierto de los dos grupos musicales, que finalizó con un "No a la megaminería contaminante" por parte de Residente, el cantante de Calle 13. Los eslóganes contra la minería fueron ovacionados por el público presente.
También convocó a pensar, a criticar pero con fundamentos y a la par, también a bailar y a disfrutar del espectáculo que a esos momentos ya padecía de calentura colectiva.
Las opiniones de estos grande músicos, tiene un especial significado, debido a que a sólo dos días, de este concierto, llegará "La Marcha por el Agua, la Vida y la Dignidad de los Pueblos", que recorre el país desde el norte hasta el sur, en protesta por los proyectos de megaminería aprobados por el Gobierno, y contra la nueva ronda petrolera, la cual licitaría la enorme mitad sur de la Amazonía ecuatoriana a las grandes multinacionales. A esta gran Marcha , se sumarán en las próximas horas colectivos y movimientos sociales llegados de la costa y del norte del país, para llegar mañana el 22 a Quito, la capital del país.
Manu Chao habla sobre la megaminería Cámara: Rubén Jurado
Las bandas del francoespañol Manu Chao y la portorriqueña Calle 13 encendieron la capital ecuatoriana conunconcierto explosivo y que sirvió de plataforma para que ambos criticaran la "minería contaminante" en América Latina.
