martes, 2 de febrero de 2010
Haití: ¡Ayuda humanitaria sí! ¡tropas no!
¡Fuera tropas yanquis y de la ONU! ¡Ayuda directa a ROZO y otras organizaciones populares haitianas!
Mientras centenares de miles de heridos están sin atención médica y 3 millones de damnificados necesitan comida y agua, Estados Unidos sigue controlando el aeropuerto para desembarcar a 16.000 soldados dotados de poderosas armas de guerra. ¡Denunciamos la ocupación militar yanqui de Haití como un nuevo crimen de lesa humanidad! ¡En este caso es Obama el principal responsable!
180.000 muertos, 500.000 heridos, un millón sin techo, decenas de miles de amputados, más de 3 millones de seres devastados, son cifras frías y aproximadas del desastre.
Estados Unidos invadió Haití con 15 buques, incluyendo un portaaviones, aviones y helicópteros, y 16.000 soldados, que se suman a los 9.000 de la ONU (brasileños, argentinos y otros). Los yanquis controlan el aeropuerto y han impedido el aterrizaje de varios aviones con equipamiento médico. Estas tropas son una fuerza de ocupación semicolonial que, ya antes reprimió violentamente a la población y están para reprimir e impedir una explosión popular que barra con el gobierno títere de Preval y termine con las transnacionales y pequeña minoría de ricos que explotan al pueblo haitiano.
Soldados en vez de enfermeras
En Estados Unidos, el sindicato National Nurses United (Unión Nacional de Enfermeros, NNU, por sus siglas en inglés), el mayor sindicato de enfermeras y enfermeros de Estados Unidos, informó que tiene 12.000 miembros voluntarios dispuestos a viajar a Haití para ayudar. Pero el gobierno de Obama se negó a financiar el viaje, medicinas y equipos. Los 400 médicos y paramédicos cubanos que están presentes en Haití desde hace años atendió a 20 veces más pacientes que todos los norteamericanos, con un promedio de seis a siete mil pacientes diarios y varias docenas de cirugías al día…
El Wall Street Journal informó que el Hospital General de Puerto Príncipe está continuamente asediado por más de 1.000 enfermos que esperan una intervención quirúrgica. “Vigilantes armados impiden pasar con sus tanques”.
La organización estadounidense de asistencia médica Partners in Health, ha advertido que hasta 20.000 haitianos pueden morir diariamente por infecciones, que ya están apareciendo, debido a que los heridos no reciben asistencia médica. Karl Penhaut, de CNN, informó que médicos estadounidenses están molestos con los soldados en la puerta del hospital. “Dicen que nunca han tenido problemas de seguridad en el hospital pero faltan suministros médicos… se preguntan que si pueden traer helicópteros con soldados, por qué no pueden también traer con ellos instrumentales médicos”.
Autoorganización popular
Una justificación para la invasión fue, supuestamente, mantener la “seguridad”. Pero en medio del desastre, quienes más garantizan la seguridad y auxilio de los haitianos son los propios haitianos más humildes.
“Nos conmueve profundamente la extraordinaria solidaridad manifestada por la población de Puerto Príncipe que… supo responder por la autoorganización, construyendo 450 campos de refugiados que contribuyeron a salvar miles de personas prisioneras de los escombros e hizo posible la supervivencia de 1.5 millones de personas gracias al hecho que compartieron en forma comunitaria todos los recursos disponibles (alimento, agua, ropa)…” (Comunicado de Plataforma Haitiana de Desarrollo Alternativo).
Ocupación militar, saqueo imperialista y deuda externa
El saqueo impuesto por la ocupación desde hace décadas, fue el primer desastre. Se privatizaron la cementera y la productora de harina estatal, y hoy Haití ya no produce harina, ni maíz y trigo, como hacía antes, porque se abrió la importación. Se privatizó la compañía telefónica echando a 3.000 trabajadores. Hoy el cemento, el teléfono y el pan son casi inalcanzables para la mayoría popular. En cambio, sí produce textiles, zapatillas y pelotitas de golf para la exportación en empresas que no pagan impuestos y fijan los salarios más bajos del mundo.
El país vivió toda su historia pagando la deuda impuesta por los colonialistas. La actual es equivalente a lo que se robó la dinastía de los Duvalier, cuyo último vástago, Baby Doc, fue expulsado del poder en 1986 por una insurrección popular y recibió asilo en Francia junto con los 900 millones de dólares que se llevó. Según la contabilidad usuraria del Banco Mundial y del BID, Haití, pese a haber pagado centenares de millones, debe hoy 1.000 millones de dólares y sigue pagando la deuda! ¿Y los 900 millones que se llevó el dictadorzuelo al servicio de Francia y Estados Unidos? Jamás fueron devueltos. Una verdadera vergüenza.
Redoblar la solidaridad
La solidaridad concreta de parte de las organizaciones obreras, estudiantiles y populares es una urgente necesidad. Acompañada con la movilización, como se hará en Buenos Aires con una marcha de repudio este viernes a la embajada yanqui.
Llamamos a la CGT y CTA que aporten de sus fondos sindicales para enviar al pueblo de Haití. Y llamen a hacer colectas en sus sindicatos. Izquierda Socialista ha lanzado una campaña de recolección de fondos para enviar a la Red ROZO (como mostramos en estas páginas y la contratapa).
Exigimos al gobierno argentino y demás gobiernos latinoamericanos, al igual que Estados Unidos y la ONU, que retiren sus tropas de inmediato. Y manden personal voluntario para la atención sanitaria para auxiliar a los pobladores pobres. A que se anule de inmediato toda la deuda externa haitiana, como lo ha hecho Venezuela. ¡Fuera las tropas ocupantes! ¡Ayuda inmediata a las organizaciones populares haitianas! ¡Que la reconstrucción la paguen el imperialismo y las multinacionales, sin condiciones! ¡Anulación de la deuda externa de Haití! ¡Plena solidaridad y movilización en defensa de su pueblo!
Como parte de la solidaridad internacional, el Comité de Enlace de la Unidad Internacional de Trabajadores (Cuarta Internacional) y la Corriente Internacional Revolucionaria, inició una campaña de ayuda a la organización popular ROZO (Red de Organizaciones Zona Oeste), que agrupa a 25 organizaciones populares, que reclama el fin de la ocupación a Haití y que, pese a que los propios compañeros de ROZO están entre los principales afectados, están organizando desde el primer día después del sismo, campamentos de solidaridad y auxilio que agrupan a los que quedaron sin casa.
Esta es la cuenta bancaria internacional en la que vamos a hacer llegar los aportes solidarios que hemos coordinado con los compañeros de Rozo de Haití (ver páginas centrales).
Número: 200026600001515.
Banco de Reservas de la Republica Dominicana
¿“Amigos” de Haití?
Mientras la ayuda de Estados Unidos y Europa llega a Haití en cuenta gotas, se reunieron en Montreal burócratas de Estados Unidos y otros países imperialistas alojados en hoteles de 5 estrellas en una "Cumbre Mundial para la Reconstrucción de Haití". Intentaron mostrar a millones conmovidas por el desastre haitiano que están haciendo algo. No invitaron a Cuba, país que sí está haciendo algo efectivo y concreto atendiendo a decenas de miles de personas con su brigada médica.
Anunciaron supuestas ayudas para la “reconstrucción” de Haití (que los propios imperialistas destruyeron antes que el terremoto). La clave de esta supuesta “ayuda” la dio unos días antes, en el Foro de Davos, Bill Clinton, ex presidente yanqui y ahora una especie de virrey designado por la ONU en Haití. Dirigiéndose a los poderosos jefes de multinacionales, Clinton dijo que era urgente “ayudar”, y que había que hacerlo fundamentalmente por interés, porque serán muy “buenas inversiones”, teniendo en cuenta, dijo, que Haití tiene “muy buenas condiciones económicas para la inversión, como por ejemplo muy bajos impuestos para exportar”. Las otras “condiciones” que Clinton no dijo en público, es el salario más bajo del mundo, menos de 100 dólares al mes por jornadas extenuantes, sin beneficios sociales ni derechos sindicales. Inversionistas multimillonarios se aprestan a hacer buenos negocios a costa de la supuesta “reconstrucción” sostenida sobre el trabajo semiesclavo de los haitianos y una “ayuda” internacional que irá a parar a los bolsillos de burócratas y multinacionales.
“Plan Marshall” del FMI
El director del FMI, Dominique Strauss-Kahn, declaró que “los golpes que recibió Haití… hacen necesario un paquete de ayuda similar al Plan Marshall, que asistió a Europa tras la Segunda Guerra, y no pequeñas migajas” (Clarín, 21/01). Todo para defender los miserables 100 millones de dólares que envió aquel organismo usurero a Haití. ¡En ayuda a los bancos imperialistas vaciados gastaron 20.000 veces más! ¡Encima lo de Haití es un préstamo y no una donación… “porque así era más rápido de dar”! Una vergüenza.
Por: Miguel Lamas (Izquierda Socialista- Argentina)
mlamas@izquierdasocialista.org.ar