La Guarura. Sistema Comunicacional Libre y Militante.
.- El día martes 17 de julio en la mañana, a las puertas de
la Asamblea Nacional, exactamente frente al punto rojo evangelizador del
sindicato de trabajadores de la AN, varios colectivos y personalidades
comprometidas con la lucha indígena por la autodemarcación de tierras
ancestrales, el pago de bienhechurías a los hacendados y el respeto a la vida
yukpa, hicieron acto de presencia, atendiendo al llamado del Frente de
Lucha por la Tierra, para la conformación de una delegación que se reuniría
con la Comisión Permanente de Asuntos Indígenas. Encabezaron dicha
delegación Sabino Romero Martínez, cacique yukpa hijo de Sabino Romero Izarra,
Carmen Fernández Romero, madre de José Luis y Alexander Fernández, yukpas
recientemente asesinados; y Ana Fernández, hija de Carmen y hermana de José
Luis y Alexander.
El ingreso a la sede de la Asamblea, caracterizado por todo
el protocolo burocrático de oficio, garantizó que las voces de Sabino, Carmen y
Ana se hicieran escuchar ante el diputado y presidente de la Comisión
Permanente de Asuntos Indígenas, José Luis González. Ante el servidor público,
la voz yukpa exigió celeridad en la investigación que logre determinar quiénes
ejecutan, amparan y financian en la Sierra de Perijá los robos, las
detenciones, los secuestros y asesinatos contra los yukpa. También se demandó
el pago de las bienhechurías de los fundos La Estrella y Las Flores que forman
parte de los territorios ancestrales pertenecientes a los yukpa, así como el
cumplimiento de las medidas de protección de las cuales deben gozar estas
comunidades y especialmente los familiares de las más recientes víctimas del
sicariato.
Especialmente contundentes y conmovedoras fueron las palabras
de Ana Fernández, quien reclamó enérgicamente el hecho de que su pueblo
estuviese siendo sometido a tan grandes injusticias bajo el silencio de los
entes del estado y la aparente salvaguardia de la ministra Nicia Maldonado. Ana
expresó el sentimiento generalizado de indefensión de su comunidad, que no ha
visto concretarse en ningún momento un apoyo efectivo por parte de esta
funcionaria que debería, por un mínimo de humanidad, poner todo su empeño en
función de garantizar el cumplimiento de las leyes que en beneficio de los
pueblos indígenas ha logrado concretar la revolución bolivariana. “Fuera Nicia,
no la queremos” fue la frase que acuñó la mayoría de los asistentes a la
reunión con la Comisión Permanente de Asuntos Indígenas.
Por parte del diputado José Luis González se hizo tácito el
compromiso de intervenir en favor de la causa yukpa a través de los mecanismos
administrativos dispuestos a su alcance.
Mientras en Caracas se sucedía este enfrentamiento entre la
resistencia yukpa y los entes burocráticos de nuestro estado bolivariano, en El
Cauca los pueblos indígenas asumían una lucha armada de dignidad y contundencia
contra las fuerzas militares del gobierno derechista de Juan Manuel Santos.
Ante semejantes paralelismos, valga la reflexión sobre las mil formas de
represión y ultraje que recaen sobre nuestros pueblos…
¡Yukpa somos todos!
¡Tierra, vida y libertad para los yukpa!