Estamos en un momento donde la situación de conflicto con la oligarquía colombiana está al borde de producir un choque entre naciones. A los pueblos indígenas y particularmente los que nos encontramos en la frontera del Perijá nos preocupa sobremanera este agravamiento de la agresividad terrorista y guerrerista del saliente gobierno de Uribe, cosa que nos ha afectado históricamente. Entendemos en ese sentido la gran responsabilidad que tenemos dentro de esta crisis como guardianes ancestrales de nuestras fronteras y de los territorios comunes entre pueblos indígenas de la frontera.
Estas letras se escriben en un momento igualmente de crisis entre el máximo Poder Judicial -TSJ- de nuestro Estado y las comunidades indígenas, quienes esperan se haga justicia con nuestros líderes, presos de la manera más injusta por tribunales que han decidido sin prueba alguna de fuerza dejar presos a nuestros familiares, Sabino Romero, Olegario Romero y Alexander Fernández, caciques fundamentales de nuestras comunidades y líderes de las luchas de Resistencia que hemos adelantado desde hace años en contra de los intereses terratenientes y trasnacionales que han querido apropiarse de nuestras tierras y acabar con el hábitat de la Sierra de Perijá, espacio imprescindible para la conservación de la vida natural y económica de la cual dependemos indígenas y criollos.
Nos parece por tanto un verdadero absurdo que nosotros todos como nación nos encontremos en este delicadísimo conflicto frente a los asesinos gobernantes colombianos y al mismo tiempo tengamos que estar desgastándonos internamente en una lucha contra viejas instituciones nuestras que todavía asumen la condición de entes colonizadores y racistas que no quieren reconocer nuestro derecho constitucional de juzgar nuestras gentes por medio de nuestros propios tribunales y costumbres de justicia. Tomando en cuenta que la justicia occidentalizada y burguesa sólo ha servido para manipular pruebas y sembrar la impunidad frente a los crímenes cometidos por los explotadores y procurar un castigo injusto y continuo frente a la acción justiciera de los pueblos organizados. Insistimos en nuestro derecho a ejercer en el marco de nuestra cultura y justicia propia lo que no quiere reconocer el TSJ al retardar por más de cinco meses una decisión de Amparo Constitucional expuesta ante este máximo Tribunal.
Pedimos en este sentido a usted como Presidente de la República que se convierta cuanto antes en un interlocutor inmediato ante el TSJ, de manera que éstos decidan frente al Amparo interpuesto o sencillamente dé usted mismo la amnistía inmediata a nuestros líderes por una razón evidente y de interés nacional.
NECESITAMOS QUE NUESTROS LIDERES ESTEN LIBRES DE INMEDIATO PARA QUE ASUMAN LA RESPONSABILIDAD DE ORGANIZAR A TODAS LAS COMUNIDADES DEL PERIJÁ ANTE UN EVENTUAL ATAQUE DEL EJÉRCITO COLOMBIANO CONTRA NUESTRO TERRITORIO. LA DEFENSA DE NUESTRA PATRIA ES TAREA DE CADA UNO DE LOS PUEBLOS QUE COMPONEMOS LA REPÚBLICA, INCLUIDOS POR SUPUESTO LOS PUEBLOS INDIGENAS. ADEMAS, ES FUNDAMENTAL QUE SE ENTIENDA LA TAREA DE MEDIACIÓN QUE PUEDEN JUGAR NUESTROS CACIQUES FRENTE A LOS MISMOS PUEBLOS YUKPA, BARÍ Y WAYÚU QUE HABITAN LA FRONTERA VENEZOLANA-COLOMBIANA QUIENES EN CONJUNTO PODEMOS JUGAR UN PAPEL MUY IMPORTANTE EN FUNCIÓN DE LA PAZ Y EN CONTRA DE LAS ESTRATEGIAS IMPERIALES Y OLIGÁRQUICAS QUE PROMUEVEN LA GUERRA ENTRE PUEBLOS HERMANOS. ANTE LA INDEFERENCIA DE LAS INSTITUCIONES EN GENERAL Y FRENTE A ESTE ASUNTO CLAVE DE INTERES NACIONAL, PEDIMOS SU INTERVENCIÓN INMEDIATA EN ESTE CONFLICTO.
GRACIAS CAMARADA POR SU SOLIDARIDAD
POR LA LIBERACION DE NUESTROS CACIQUES, QUE VIVA LA PAZ, LA JUSTICIA Y LA REVOLUCION.
Lucía Martínez Esposa de Sabino Romero
Deisy González Esposa de Olegario Romero
Carmén Fernández Madre de Alexander Fernandez
Sabino Romero (Hijo)
Miembros todos de las Comunidades indígenas Yukpas Chaktapa y Guamo Pamocha