Aana Cuento, Fiesta y Candela
Hace unos meses Nicia Maldonado
estuvo presidiendo junto a otras autoriadades locales y nacionales un acto de
entrega de tecnología para una escuela en la Laguna de Sinamaica, fuimos varios
en las tareas que nos ocupan contantemente y nos topamos con el acto. Estuvimos
entre el público. Muchos amigos y amigas entre los funcionarios hacían la
escena familiar. Mientras saludabamos la Ministra de Pueblos Indígenas comenzó
a hablar y de inmediato no sabiamos si reir o lamentarnos, le hablaba al
público de funcionarios y funcionarias, muchos de ellos ataviados de manta y
sombreros wayúu, cómo si fueran niños sometidos al peor de los caletreros, era
un esfuerzo de imitación de Hugo Chávez mezclado con un vergonzoso tono de
pretendida ignorancia india y distanacia de lo criollo, complaciendo ella, pero
también Nohelí Pocaterra, que sabemos que de bruta no tiene nada, la idea de
que los indios somos tontos para ocultar en tontismos ladinos su complicidad y
su negocio. La gente presente en aquella escuela de Sinamaica, se veía obligada
a completar las frases que ella iniciaba con dificultad en una imitación de los
peores maestros del caletre. Decadencia es la única palabra que define
moralmente aquella escena.
No nos alargaremos más sobre este
espanto, esta bufona de Palacio que hace palidecer a María Bolívar y
avergonzar, desde hace años su origen indígena, sin que nadie en su sano
chavismo pudiera hacer nada para impedir que el propio Presidente Chávez, la
mantuviera rabiosamente en su cargo, desde el cual hizo todo el daño que otros
ministerios encargaron a esta segundona de los verdaderos operadores del plan
lacayo sobre los territorios indìgenas.
Sólo nos vale traerla al texto
porque su nombramiento cómo Presidente de Corpo Amazonas representa un guinda
más de lo que es y ha sido la saga de nombramientos desafortunados y
francamente deseperanzadores con los que el gobierno adorna estas últimas
semanas. Estos nombramientos son la superación de la tristeza con la que los
chavistas asisten a la suprtesión de las voces moderadamente críticas de sus
más lúcidas voces de opinión. Maduro habló de que iba a dar nombres de gente
que aparentando ser del proceso se la pasaban cuestionando y aunque ante la
reacción de algunos intelectuales no ternminó nunca de dar nombres, hizo mucho
más que eso, los eliminó de las parrillas de programas de radio y televisión en
una purga comunicacional sin precedentes que contó con el apoyo de la
oposición.
Pareciera que en algo están de
acuerdo los dos polos de la polarización, en ensordecer los oidos del pueblo
con su show clientelar que bien podía llamarse “la guerra de los polos” con los
mismos animadores de plástico con los que recrea la polarización el canal
golpista verdadero: Venevisión.
Todo indica que gobernar por
pactos y por acuerdos de trastienda, hasta par botar la basura será el estilo
del desafortunado primer gobierno chavista de la historia. Mientras reina el
desconcierto todos añoran a un caudillo que en su fiereza, tuvo la fuerza de
contener hasta sus propios errores para que no calleran en el barranco de la
decadencia. Los últimos nombramientos del Presidente sólo son explicables desde
esa lógica: Reverol en Corpozulia indica que el Presidente no se lava los
dientes después de comer y el Señor Mestre, del que se libró Sucre por obra de
la última gracia que Chávez hizo por ese estado oriental sólo puede indicar que
el Presidente sólo se baña una vez a la semana. Con todo parece el mas aseado
de los del gobierno. por algo lo puso Chávez ahí.
Mientras tanto el movimiento
social luce aletargado y sumiso, no pareciera que huboera fuerza para ponerse
al frente de la crítica y el descontento social, en el prevalece una cultura de
la modorra que no la supera ningún ancianato. Mientras la gobernabilidad se cae
a pedazos, ellos se preparan para, a fines de año, hacerle una propuesta a
Nicolás.
Se asemeja el actual momento
político a aquella ausencia de norte con los que Acción Democrática vió
palidecer sus dias mientras caía irremediablemente el último gobierno de CAP.
En el marco de esta tragedia-comedia
que lo ocupa todo, pero que nadie se atreve a describirla con el tono de
malestar que se merece, algunos de nostoros esperamos a saber si el gobierno se
atreve, en medios de tan obvias debilidades a darle una puñalada final a la
causa de los terrioriosy de la defensa del agua y de la vida en Perijá. Nunca
estuvo tan servida la mesa, pero el asunto es si hay la fuerza o sii la fuerza
del compromiso comercial con las transnacionales chinas, rusas y americanas
estan fuerte que no importa que el prestigio del gobierno quede hecho harapos
sucios. En todo caso parece que el gobierno y todos sus voceros apuestan a que
el daño hecho a la resistencia indígena en ocho largos años de una política
sostenida desmatemlamiento clientelar de las voluntades, de disolución
inigualable de la cultura ancestral y de represión y crimen contra los más
incómodos pudiera ser suficiente.
En ocho años está intacto y
fortalecido política, judicial y militarmente el aparato criminal de los dueños
de las vacas y la unidad de lucha de los pueblos ind´ñigenas está más lesionada
que nunca. El miedo es el sentimiento más digno porque indica que aún tienes
corazón aquí en esta región, en nuestra tierra.
Por su parte los ministros sacan
su cuenta y se dan por pagados en este asunto de la demarcación, de
imponer su propio esquema de demarcación y sus propia agenda de relación con
sus propios actores, pasaron a decir, obviamente, las cifras indican que todo
está saldado.
La unidad de las comunidades y de
los trabajadores está ante nosotros si atendemos a nuestra desesperanza,
ahorrándonos la mayor cantidad de mitos poderosos y de nostalgias posibles,
sobre todo si nos vienen de las telenovelas del Canal 8, donde una pobre
muchacha del barrio, maria o juana, se enamora de Diosdado y se vuelve
Viceministra, si cantamos esa canción de desesperanza que cantan los nuestros,
si aprendemos de ella, podremos reconstruir la esperanza. El verdadero legado
es lo que hemos aprendido, y no poca cosa.
El Congreso del Control Obrero en
Guayana, por poner un ejemplo querido y dolido, debe superar las divisiones
ocasionadas por la relación con el poder y no por la lucha de clases, y las
comunidades indígenas y campesinas debemos iniciar un diálogo de nosotros con
nosotros mismos, sin presentarle planes a nadie ni rellenar de aprobaciones las
planilas de un plan que cómo siempre viene cocinado. Nadie nos dió ni nos dará
un poder que no tomemos y merezcamos.
el camino es el de las
comunidades.