“La propia experiencia, además del estudio de la
teoría política, demuestra que a esta altura de la historia, nada tiene que
buscar nuestro país en el cambio de una camarilla por otra; o de un partido o
grupo de partidos por otro partido o grupos de partidos. Lo que se trata de
lograr es un cambio revolucionario, de fondo, en la composición social del
gobierno que sea capaz de modificar las estructuras mismas del país y
consolidar un régimen independiente, liberado del imperialismo y la oligarquía.
La magnitud y causas de los problemas nacionales requieren, sin duda, la
conquista del Poder por una alianza de las clases populares democráticas y
progresistas con la fuerza suficiente en lo político y militar para hacer
frente a las fuerzas de la reacción. (Ojeda, Fabricio. “La guerra del pueblo”. (Edit. Domingo Fuentes.
Caracas.1970. pp. 50-51).